Qué pasaría si la mitología griega viviera en el presente del bajofondo de una ciudad como Buenos Aires. Eso se pregunta la dramaturga y directora Mariana Chaud en esta puesta construída en diálogo con la obra de Nahuel Vecino.
Por Inés Aranda Morea. Fotos: Carlos Furman.
Ocurren cosas delirantes en una zona marginal de la ciudad. Donde la mitología se cruza con las problemáticas sociales más actuales, que parecen ser las mismas de siempre: droga, pobreza, violencia de género, relaciones tóxicas, maltrato, machismo, homofobia, violencia policial, contaminación ambiental, autoestima baja, depresión y tendencias suicidas, entre otros. A Pamela no le importa que Áyax ame a otra. A uno de los secuaces de Ayax no le importa que Pamela lo ame. La manada convive día a día entre la traición, el castigo y el purgatorio. Además está el coro, un tío gay y una cíclope que toca el teclado. Pequeña Pamela llega para romper con historias de amor hegemónicas y dejar al descubierto temas tabúes y complejos de nuestra sociología y de los que poco se habla.

Pequeña Pamela invita a la reflexión, entrelazando diferentes temáticas que nos atraviesan a todos como sociedad. Hay múltiples referencias culturales a décadas pasadas durante el desarrollo de la obra que provienen del personaje del tío homosexual encarnado por Lalo Rotavería, y que funciona como un comic relief que libera la tensión acumulada a lo largo de la tragedia. Además de Rotavería, el elenco de la nueva propuesta de Mariana Chaud está conformado por Marcos Ferrante, Santiago Gobernori, Rosalba Menna, Iride Mockert, Camila Peralta y Julián Larquier Tellarini.

La música, en su justa medida, acompaña las situaciones que transcurren y crea el efecto deseado: misterio, tensión y drama. La escenografía sobre el escenario elevado del Teatro Sarmiento, es realmente espectacular, extremadamente realista. Musgo, caracoles, caños de desagüe, agua corriendo y hasta una tumba que deja entrar y salir a los personajes, construyen un mundo casi real. El texto de Chaud y las buenas actuaciones dan como resultado una obra cruda que propone una mirada diferente. Un delirio completamente real y necesario de contar.
“Pequeña Pamela” se presenta de jueves a domingos a las 20 horas en el Teatro Sarmiento, Av. Sarmiento 2715. Entradas a través de la web del Complejo Teatral de Buenos Aires.